viernes, 7 de diciembre de 2012

Soy metalero y estoy orgulloso

Mi abuela me dice que "me va a salir el cachudo", que porque agito la cabeza estoy loco. Que lo que yo escucho es música satánica y me tiene mal. A eso lo llamo hipocresía porque quizá ella miente, cosa que es más "satánica" que oir un estilo particular de música.

La moda a veces exige a muchos a que les guste algo solo para ser aceptados. Lo que sucede con el heavy metal es lo contrario, como lo explica el documental Metal: A Headbanger's journey. Suele ser que nos sintamos raros por ser como somos, pero sabemos que hay otros raros además de nosotros, lo que nos llena de orgullo. Yo lo considero una forma sana de expulsar mi furia causada por un mundo injusto.

La parte religiosa: sus letras abordan este tema desde una perspectiva más abierta (pero radical). Rechazan toda imposición, adoctrinamiento, control... es decir, buscan libertad. Si pensar de forma muy radical está mal, entonces quien compone la letra de la canción está mal, no quién la escucha. Gustar no es estar de acuerdo. Cada quien debe pensar por sí mismo, el exceso de influencia causa dependencia.

Me gusta la música clásica, el rock, la trova, el jazz... No tengo porque limitarme a un estilo, pero por supuesto, tengo un claro favorito. Denigrar algo sin conocerlo bien es muy malo. Así que yo tengo el derecho de darme el gusto y placer de decir
Fuck yeah!



jueves, 29 de noviembre de 2012

Música: arte a veces poco valorado

Hace poco tuve la oportunidad de asistir al V Festival de Internacional Cantautoras (Managua) organizado por Katia Cardenal. Fue un gran espectáculo, desde mi punto de vista. Me dió la impresión que aquí en mi país no se aprecia como se debería a la música nacional ya que, si bien el teatro no estaba vacío, ni siquiera mis amigos a los que les gusta la música de Katia se habían enterado del evento el cual fue gratuito. Nunca oirás decir a un jóven nica pedir que "le pases" canciones del Dúo Guardabarranco.

Me parece una lástima, ya que la verdad ¡se pierden de verdadero arte! Ahora bien, no quiero defender toda la música hecha aquí, porque también hay sus grupos "balurdes", pero ¡¿cómo se llena el centro comercial para ver fuegos artificiales y medio oir a un grupo musical balurde!? Sí, me da decepción, pero no me quita mi orgullo nica.

¿Cómo me di cuenta de que habría un concierto? Gracias al apoyo de El Nuevo Diario, yo me pude enterar. Varias empresas anunciaron el evento, las mismas de siempre. La Alianza Francesa ha estado apoyando también numerosos eventos culturales. Danza, ferias de libros, exposiciones de pintura, festivales de poesía... Todo un repertorio de cosas que podemos apreciar sin ningún costo. 

Creo que deberíamos ir menos a la disco y más al teatro, pero es cosa de cada quien. Los que sí saben (o sabemos) apreciar el arte tenemos la dicha que acá no cuesta mucho. Vasta ir a Granada y gozar de las obras de los demás. Y además, encontrar inspiración para las propias.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Un agnóstico en un movimiento religioso



Recientemente me he unido a un movimiento juvenil llamado FOC, que se origina en los colegios Pureza de María. He encontrado que, a pesar de que algunos consideren lo religioso como algo manipulador (yo fui uno de ellos), se le puede hallar el lado positivo: hace que los jóvenes reflexionemos y meditemos, aprendamos a llevarnos mejor con los demás y quizá hasta "amar al prójimo". ¿Se puede justificar una manipulación si se hace para bien? Esto depende del contexto. 

Las mentes jóvenes adoctrinadas son muy fáciles de persuadir. He conocido personas más o menos de mi edad muy convencidas de sus errores... Creen, por ejemplo, que la Iglesia Católica es "la mejor", que los testigos de Jehová están locos, que todo lo que dice una monja o un sacerdote está correcto, incluso, creen que el aborto está mal. A propósito de esto, creo que debemos diferenciar el aborto electivo y el aborto terapéutico. Creo que la vida de la madre vale más que la de alguien que ni siquiera ha nacido aún. Pero la iglesia no piensa lo mismo.

Ahora bien, lo más sensato es analizar esto con el fin de ver pros y contras. No hay que ver todo como blanco o negro, porque también hay grises. Yo he podido aprovechar esas reuniones para conocer gente nueva, compartir algo que ellos suelen llamar amistad. Sinceramente, no creía que me llegara a gustar, pero me he sorprendido, me ha parecido una experiencia muy agradable. Todos nos tratamos como hermanos, como debería ser.

Esto no quiere decir que yo me vaya a dejar llevar por todo o que estaré de acuerdo con todo. Las naranjas traen semillas y aún así las compramos por su jugo, el cual se puede extraer sin semillas sabiendo separar. Lo mismo sucede aquí. No soy un fanático religioso, y no se debe serlo para aprender cosas positivas en las actividades de FOC. Quizá yo sea el único que piensa como un agnóstico, pero eso no importa mucho, me sé comportar en cada lugar y momento de forma adecuada y no criticaré la religión en ese momento, por supuesto. Es más algunos saben de mi inclinación al agnosticismo, y aún así, soy bienvenido.

Mi conclusión es que todos deberíamos ver las dos caras de la moneda. Decían que Robin Hood robaba para darle a los pobres, ¡¿lo consideras correcto?! Alguna vez pensé: la perfección depende de cada persona, de cada punto de vista. Animate a probar cosas nuevas porque la rutina suele llegar a aburrir. Hoy puedo decir que no me arrepiento de haberme unido a FOC. Y por último, quiero decir que estoy muy agradecido con aquellas personas que me han ayudado a integrarme.